Usos y hábitos de las internautas en Argentina

Redes sociales, información, trabajo y la forma en la que ven a Internet en sus vidas, algunos de los ejes de un nuevo estudio de Kantar TNS

De las redes sociales a los juegos, el lugar de la mujer argentina en el mundo online es cada vez mayor.

Así lo demuestra un nuevo estudio Connected Life realizado por Kantar TNS en el marco del Día Internacional de la mujer, donde revela cuáles son los hábitos y tendencias de las internautas.

A la hora de informarse, las argentinas que trabajan muestran un "mayor consumo de los medios escritos digitales, mientras que las que no consumen más radio", explicó Mercedes Ruiz Barrio, directora comercial y Nuevos Desarrollos en Kantar TNS Argentina, según La Nación.

Redes sociales y el uso perfil de internauta

Además, su consumo promedio de redes sociales es de 8,5 plataformas distintas por semana, donde invierten 2,3 horas al día. En total, 9 de cada 10 mujeres de todas las edades acceden a Facebook, y el 74% a Whatsapp. YouTube está tercera en popularidad.

En cuanto a la importancia de Internet en la vida cotidiana, Ruiz Barrio explica que el segmento más fuerte en Argentina es el de las mujeres con un perfil "funcional", es decir, las que ven en Internet un recurso más entre otros.

"Este segmento está seguido, con una diferencia mínima, por el segmento 'líderes', que ven a Internet como el medio más importante para dar y recibir información u opiniones", explica.

Faltan profesionales

Sin embargo, la proporción de mujeres en el sector de la tecnología informática sigue siendo baja: solo uno de cada tres profesionales TI es mujer y sólo en el 11% de las empresas del sector se produce una equivalencia entre ambos géneros.

Las áreas en las que trabajan más mujeres son las de diseño web, experiencia de usuario, multimedia, programación y base de datos, donde la proporción sube al 50%. Sin embargo, en otros sectores no supera el 20%.

Estos números se dan en un contexto donde las empresas están en plena "guerra por el talento", donde los graduados de carreras informáticas –donde las mujeres representan el 17%– no alcanzan para cubrir la creciente demanda laborar.