Telefónica y Telecom en la mira de las cámaras de electro-electrónica
Por Leandro Piñeiro 10 de Mayo de 2007Cinco cámaras de la industria denunciaron que estas empresas no cumplen con la totalidad del sistema implementado por la Ley. En 2006, las compras de las telcos al exterior de productos también fabricados localmente llegaron a los 100 millones de pesos. Según un informe, reduciendo sólo un 30% de las importaciones totales se generarían alrededor de 350 mil puestos de empleos directos e indirectos.
"A similitud de precios, debe darse preferencia a la industria nacional por sobre la extranjera". Ese extracto sintetiza, a grandes rasgos, el espíritu de la Ley 25.551, más conocida como Compre Nacional. En este punto se focalizaron cinco cámaras de la industria electro-electrónica del país cuando decidieron denunciar públicamente a Telefónica y Telecom, por sus "mecanismos desleales" que las llevan a incumplir las normativas de la Ley.
Las entidades, que esta mañana en conferencia de prensa, denunciaron a las telcos son la Asociación de la Pequeña y Mediana Industria Electrónica (APYMIE); la Cámara Argentina de Industrias Electrónicas, Electromecánicas y Luminotécnicas (CADIEEL); la Cámara Argentina de Telecomunicaciones, Informática, Control Automático y Contenidos (CATYA); la Cámara Argentina de Seguridad Electrónica (CASEL); y la Cámara de Industrias Informáticas, Electrónicas y de Comunicaciones del Centro de Argentina (CIIECCA).
La denuncia de estas cinco cámaras gira en torno a los mecanismos empleados por estas dos empresas de telecomunicaciones para evadir el alcance de la Ley de Compre Nacional. Según ellas, los procedimientos de contratación que emplean carecen de transparencia, ya que impiden la participación y la presencia de los oferentes en los actos de apertura de ofertas, e imposibilitan el acceso a las actuaciones que lleven a cerciorar un cumplimiento efectivo del régimen estipulado por la Ley.
Lo que establece Compre Nacional son normas para priorizar a la industria nacional en las compras que realizan el Estado y los concesionarios de servicios públicos. Si bien estas dos telcos son compañías privadas y a priori no entrarían en el rango de la aplicabilidad, desde el momento en que comenzaron a utilizar recursos intangibles del Estado, como las licencias y concesiones que les fueron otorgadas para explotar los servicios de telecomunicación, se encuentran obligadas a cumplir con la ley.
Según datos relevados por las propias cámaras, el año pasado las compras de Telefónica y Telecom en productos extranjeros fabricados también localmente, llegaron a los 100 millones de pesos. En ese sentido, la Intercámara de Industrias Electrónicas realizó un estudio donde aseguró que se generarían alrededor de 350 mil puestos de empleos directos e indirectos en caso de suprimir sólo un 30% del total de importaciones que burlan los procedimientos legales.
Cabe destacar que la Ley de Compre Nacional no promueve la adquisición de productos más caros o que no satisfagan los estándares internacionales de calidad, condición que los representantes de las cinco cámaras se encargaron de destacar durante la conferencia.
Entre los procedimientos "desleales" aplicados por las telcos se encuentra el sistema de pedido de mejoras sucesivas de precios, que se lleva a cabo por sobre cerrado o por Internet a través del mecanismo de subasta inversa, en el que los participantes desconocen cuáles son los precios cotizados sucesivamente. De esta manera, amparándose en la "reserva de información" se terminan cerrando contratos con fabricantes extranjeros.
Otro de los mecanismos empleados por Telefónica (la telco que más duramente fue atacada) es pedir a los fabricantes la aprobación de los productos por sus empresas asociadas en Brasil, Chile y Perú, y la obligación de que el oferente posea soporte técnico en esos países. Este punto es muy difícil de cumplir para las PyMEs locales, teniendo en cuenta los costos que todo ese proceso implica.
Además de denunciar los métodos de las telcos, las cámaras hicieron hincapié en que la Ley de Compre Nacional necesita más rigurosidad en su cumplimiento y mayor compromiso en la implementación. Los representantes destacaron el caso brasileño, donde se privilegia a la industria nacional por medio de contemplaciones en la constitución nacional, y los mecanismos de compra son reglamentados previamente a la firma de cualquier contrato con multinacionales.