Diez razones para comprar una cámara de red

El fabricante Axis sostuvo que los dispositivos no sólo cumplen los mismos requisitos y especificaciones de las analógicas, sino que las superan en rendimiento

Desde Axis Communications afirmaron que las cámaras de red representan tienen una tasa de convergencia anual en pleno crecimiento, y que hasta el 2014 representarán el 50% del mercado total de vigilancia, a nivel global. Por esa razón, presentó un estudio en el que planteó las diferencias funcionales más importantes en comparación con los dispositivos analógicos, y porqué esos son factores importantes para entender cuándo efectuar la compra de la próxima cámara.

  • Las cámaras de red ponen fin a los problemas de entrelazado. Una cámara analógica a alta resolución (4CIF) tiene un importante problema con el entrelazado. Una cámara de red utiliza la tecnología de “barrido progresivo”, que se adapta mejor a la representación de forma nítida de los objetos en movimiento.
  • Resolución megapíxel y funciones HDTV. Las cámaras analógicas están sujetas a las especificaciones NTSC/PAL, con una resolución que corresponde a 0,4 megapíxel a 4CIF. Sin embargo, las funciones de alta resolución se han convertido en requisitos habituales en las aplicaciones de vigilancia. Las cámaras de red cumplen estos requisitos y están en condiciones de proporcionar mayor detalle y de cubrir superficies mayores que las cámaras analógicas tradicionales. Las principales cámaras de red actuales ofrecen completas funciones HDTV de conformidad con las normas SMPTE y HDTV.
  • Inteligencia al nivel de la cámara. El vídeo inteligente está adquiriendo cada vez mayor popularidad. Las cámaras de red pueden disponer de detección de movimiento integrada estándar y gestión de alarmas para que la cámara decida cuándo enviar el vídeo, a qué velocidad de imagen y resolución, y cuándo alertar a un operador determinado para que supervise y/o reaccione ante la alarma. Otra aplicación es la alarma antimanipulación.
  • Audio integrado. Con un sistema analógico, el audio no es posible salvo que desee establecer líneas de audio independientes al DVR. Una cámara de red soluciona este problema al capturar el audio en la cámara, sincronizándolo con el vídeo o incluso integrándolo en el mismo flujo de vídeo, y devolviéndolo después para la supervisión y/o grabación a través de la red.
  • Comunicación segura. Con una cámara analógica, la señal de vídeo se transporta por un cable coaxial sin ningún cifrado ni autenticación. En el caso del vídeo en red, la cámara puede cifrar el vídeo que se envía a través de la red para asegurarse de que no pueda visualizarse ni interferirse.
  • Opciones de infraestructuras flexibles y rentables. El vídeo analógico se transmite mediante cableado coaxial de elevado coste, a través de fibra patentada o por un medio inalámbrico. Añadir la alimentación, entradas/salidas y audio complica aún más esta situación. Los sistemas digitales estándar basados en IP superan estos obstáculos a un coste muy reducido y con muchas más opciones.
  • Una solución digital real. El sensor CCD de una cámara analógica hace un total de tres conversiones y, con cada una de ellas, se pierde calidad de imagen. En el sistema de cámaras de red, las imágenes se digitalizan una vez y permanecen digitales durante todo el proceso; no hay conversiones innecesarias ni degradación de la imagen.
  • Menor costo total de propiedad. El precio inicial de una cámara de red puede ser, en efecto, mayor si sólo se compara la cámara. Pero comparar el coste por canal, y la cámara de red, con toda su flexibilidad y rendimiento superior, se hace rápidamente comparable con un sistema analógico equipado con un DVR.