"Llamamos al Gobierno e Industria a que el árbol no nos impida ver el bosque"

El Departamento de Computación de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA emitió un comunicado para expresar su postura sobre el faltante de recursos humanos IT. Además, Hugo Scolnik amplía el debate

La semana pasada este medio publicó dos artículos que mostraron distintas opiniones sobre la problemática de los recursos humanos en el ámbito de las nuevas tecnologías de la información. En una primera instancia, el creador y actual director del Departamento de Computación de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA, Hugo Scolnik, criticó la posición que tomó el sector privado: "No les va a gustar que lo diga, pero se acordaron que existen las universidades ahora que las necesitan" (ver artículo completo aquí).

A modo de respuesta, Pablo Iacub, presidente de la compañía desarrolladora de software Calipso, envió una carta a la redacción de Canal AR en la cual plasmó su postura sobre el problema. "La industria ha hecho más por acercarse a la academia, que lo inverso", dijo. "Esta carta seguramente representa al grupo de empresas que sabemos que hemos tratado de acercarnos tanto como nos fue posible, y quizás esto inicie un debate indispensable para el futuro del sector".

Frente a la visión de Iacub, Scolnik alienta el debate a través de una nueva carta enviada a este medio:

Agradezco los conceptos de Pablo Iacub, y parto del hecho de que todos queremos una pujante y exitosa industria informática, aunque podamos diferir en algunos aspectos acerca de cómo lograr el objetivo.

Es verdad que existió un divorcio profundo entre la academia y la industria, y una buena parte se debe a los universitarios por una razón muy simple: tienen que vivir, y lo esencial -como para cualquier asalariado- es lo que cobra a fin de mes. Hace unos años se inventaron los incentivos que se pagan con criterios cientificistas, o sea premiando las publicaciones en revistas internacionales. Por eso se elige entrar en la "carrera editorial" y no en la productiva. Entre hacer un sistema para PAMI o publicar un paper, la elección está clara. Además el publish or perish es lo que se valora en los concursos. En definitiva, si la manera de maximizar los beneficios personales difiere de la maximización de los beneficios de la sociedad en su conjunto, entonces estamos en problemas (ver espanol.groups.yahoo.com/group/PronunArgentina/message/2012).

Por ese motivo la mayor parte de las iniciativas empresarias -que desconocen esa realidad- no son atendidas con entusiasmo. Muchos de esos "paquetes" se diseñan en otros países, ignorando la realidad local.

Pablo cita a la IBM 370 de Ingeniería. La primera computadora digital fue la Clementina, comprada en 1959 con fondos exclusivos del CONICET, y en ella nos formamos la primera generación de programadores. Lo de IBM y otras empresas, fue un enfoque lógico para formar gente en sus tecnologías, siguiendo sus naturales intereses. O sea que la computación comenzó por la acción estatal y no por una empresa.

Es cierto que tenemos convenios con algunas empresas, pero eso no alcanza en absoluto para mejorar al sistema universitario. Por ejemplo, el presupuesto 2008 para gastos docentes del Departamento de Computación que dirijo es de $37.000, así que alguien tendría que darnos sanos consejos acerca de cómo sobrevivir (eso se origina en el hecho de que la UBA debe destinar el 95% de su presupuesto a salarios). Las instalaciones son una ruina, no hay dinero ni para actualizar el hardware seriamente, no tenemos máquinas multicore, no podemos comprar los libros que necesitamos, etc. Por eso estoy proponiendo un comité mixto, estatal y privado, para atacar los problemas de fondo en forma racional. Cabe destacar que existe un muy buen diálogo con los ministerios de Educación y el de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, así como con las autoridades universitarias y las cámaras empresarias. Así que argentinos a las cosas!

Con respecto a los planes de estudio todas las universidades nacionales con carreras de informática nos negamos a adaptarlos para seguir lo que hoy las empresas necesitan y que mañana desaparecerán. Lo único que funciona es enseñar a pensar, dar una formación muy rigurosa en lógica, algoritmos, teoría de lenguajes, etc. No por casualidad varios equipos de Exactas figuraron en puestos muy destacados en las competencias internacionales de programación, e incluso Sergio Sancho ganó la competencia Top Coder de Google. Eso no es casualidad, y no se consigue con cursitos rápidos de Java u otros lenguajes de moda. Y esos jóvenes pueden hacer rendir a una empresa de un modo increíble. Sobre ese tema estamos sacando un comunicado de nuestro Departamento
(ver abajo).

Nuestras clases son en horario nocturno, y de hecho el 90% de los estudiantes trabaja en la industria. A mi no me divierte dar clase hasta las 22hs., pero lo hago, como los otros docentes, porque es una necesidad. Si la industria diese becas en forma masiva otros serían los resultados.

No comparto que las universidades sean neutrales. Justamente el debate no es lo que falta en la UBA, y todo lo relacionado a la industria nacional y el rol de los egresados han sido discutidos extensamente, y hemos invitado a líderes de la industria a dar charlas al respecto.

Y si la industria quiere promover innovaciones, etc., sería bueno que alguna vez vengan a la universidad para ver lo que se investiga y lo que hacen los tesistas. Siempre invitamos pero nunca vienen.

Finalmente, la Escuela de Ciencias Informáticas que organizamos desde hace más de veinte años, nuclea a la academia y la industria, las empresas hacen presentaciones de interés académico, etc.


Comunicado del Departamento de Computación de la UBA

Desde el Departamento de Computación de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires, celebramos los contactos entre empresarios del sector informático y autoridades gubernamentales con el objetivo de promover la industria del software. También compartimos, junto con ellos, la preocupación por la falta de profesionales informáticos. Sin embargo, no podemos menos que expresar nuestra preocupación ante algunos aspectos de la solución que se pretende para este problema.

Entendemos que las carreras cortas, lejos de ser una solución para el problema de la falta de profesionales informáticos y contribuir al desarrollo del país, sirven solamente como un paliativo de baja calidad que parece responder al viejo paradigma de "pan para hoy, hambre para mañana".

Somos plenamente conscientes de la necesidad urgente por parte del sector de cubrir puestos laborales, pero como universidad pública, creemos que la mejor alternativa consiste en estimular a nuestros jóvenes a perseguir una formación integral, que los complete como personas, que les enseñe a pensar, y que los prepare para los desafíos de mañana, cuando las tecnologías que se enseñan en los cursos breves de hoy en día no sean más que un recuerdo de anticuario. Lejos de ser alarmistas, basta con revisar la historia de la informática y la tecnología en general de los últimos años para ver la velocidad con la que las "panaceas" proclamadas por los fabricantes informáticos se reemplazan las unas a las otras.

Consideramos fundamental poner el énfasis en apoyar y promover carreras universitarias completas de excelente nivel que provean una formación a prueba del tiempo, enseñando a los estudiantes a entender las situaciones de fondo, a ser creativos, a reentrenarse, a ser pensadores independientes a las vez que jugadores de equipo trabajando por un objetivo común. No vemos incompatibilidad entre una propuesta como ésta y las necesidades urgentes del momento: en una carrera que forma profesionales de un nivel superior al de las carreras breves es muy común que los estudiantes trabajen mientras estudian, muchas veces desde segundo año, con un rendimiento y capacidad decididamente superior al que se adquieren en tecnicaturas o cursos cortos.

Llamamos al Gobierno e Industria a que el árbol no nos impida ver el bosque: que los apremios de hoy no conspiren contra la construcción del futuro de la Argentina. Entendamos que como Educadores, Empresarios y Gobernantes tenemos la responsabilidad social de aportar a la formación de una comunidad más justa, y que parte de esa responsabilidad es ofrecerle a las nuevas generaciones la posibilidad de insertarse en el mercado laboral con el sustento de una educación que los convierta no sólo en profesionales, sino también en individuos creativos y pensantes.

Dr.Hugo D.Scolnik (en representación de los docentes e investigadores del Departamento de Computación , FCEN -UBA)


Más información: www.dc.uba.ar.