Chrysalis y Nazca Ventures financiarán startups con USD 400.000

Ambas compañías se unieron y lanzaron una gran convocatoria para proyectos de América Latina. ¿Qué hace falta saber para participar?

Startups, incubadoras y una fuerte tendencia a la innovación ya forman parte de la cultura digital de América Latina. Llega una nueva convocatoria con uno de los financiamientos más grandes del ecosistema regional.

Chrysalis, la incubadora chilena de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, y el fondo privado internacional Nazca Ventures, unieron fuerzas y crearon un programa de co-inversión.

El mismo estará destinado para el financiamiento de startups globales, dinámicas y de alto potencial de crecimiento en América Latina. Entregará financiamiento por más de USD 400.000 por cada startup, uno de los presupuestos más altos de América Latina. Las postulaciones estarán abiertas hasta el domingo 19 de abril en Fundacity.

"Este acuerdo resulta de una importancia muy relevante para Chrysalis, pues complementa nuestra oferta de manera significativa dado que una de las dificultades que hemos enfrentado en nuestro trabajo con los emprendedores es el proceso de búsqueda de financiación privada para sus procesos de crecimiento y desarrollo”, dice Walter Rosenthal, Gerente de Chrysalis.

"Con este convenio esperamos facilitar el acceso de nuestra cartera al financiamiento privado y de esa manera proyectar su crecimiento y dotar al emprendedor con una oferta única, para que en un solo lugar encuentre todo lo necesario para poder cumplir su sueño de crear un negocio global", agregó.

Las startups podrían llegar a recibir, además de la inversión, una serie de mentorías y feedback de ambas entidades, que les permitirán modelar, fortalecer y desarrollar su negocio en el mercado, elementos que también son piezas claves para avanzar en el desarrollo emprendedor.

Según explicó Rosenthal, con este convenio y este proceso conjunto los proyectos podrán contar con la posibilidad de financiar al menos sus dos primeros años de operación, pensando en acciones que estén ya posicionadas en el continente americano.

"Sentimos que al conseguir el propósito que hemos planteado, se debería transformar en un elemento común del ecosistema, en el cual incubadoras, aceleradoras, fondos de inversión y otras estructuras que apoyan emprendedores y que trabajan de la mano con ellos, vean en la sinergia del trabajo colaborativo una opción concreta de facilitar el desarrollo de casos de emprendedores destacados que circulan en nuestro ecosistema”, concluye el directivo de Chrysalis.