Los smartphones están cambiando la forma en la que compramos cosas. Y esta tendencia, el m-commerce, será el próximo motor de las aplicaciones y redes sociales que más usamos.

Esta semana, Instagram anunció que comenzó a probar unas nuevas "etiquetas de compra" en sus fotos que les permitirán a los usuarios comprar productos directamente desde la red social.



En principio, el ensayo es con un puñado de marcas minoristas de Estados Unidos como Kate Spade, JackThreads y Warby Parker. Estas compartirán fotos con más contenidos, como los precios, información, modelos y disponibilidad del producto. Todo sin abandonar la app.

Una vez dentro del post, el consumidor puede darle al enlace "comprar" y ser dirigido directamente al sitio web de la empresa, desde donde puede manejar el resto de la operación. Por ahora está en beta –y sólo para iOS– pero la idea es llevarlo a empresas de todo el mundo.

Con el boom del comercio electrónico y móvil, Instagram busca consolidarse como una plataforma de "descubrimiento" donde los usuarios puedan encontrar de forma directa todo tipo de información sobre productos específicos, acelerar su decisión, y por lo tanto la compra.

"En una encuesta interna nos enteramos de que la gran mayoría de las compras online tardan un día o más", explicó Instagram en un blog, y agregó: "Esta prueba da a nuestra comunidad pasos valiosos a lo largo de su viaje de compras".

Más información: www.instagram.com.