En las últimas décadas la importancia de la relación empleado-organización no ha dejado de aumentar. Se sabe que un equipo motivado y comprometido es, junto a la marca, el gran activo intangible de las empresas del siglo XXI.

Para conseguirlo, las empresas deben proporcionar al empleado un buen ambiente de trabajo, capacitación, beneficios, horario flexible, pero además deben conseguir que los empleados se sientan implicados en la organización en todos los niveles.

La aplicación de los principios de Marketing a la dirección de los RR.HH. con el objetivo de fortalecer las relaciones entre la empresa, como marca empleadora, y el empleado, como cliente interno, es lo que se denomina Employer Branding. El Capital Humano se incorpora de una manera estratégica.

El concepto de Talent Branding surge de exportar hacia afuera la marca empleadora para atraer a los mejores talentos. Desarrollar nuestra marca empleadora afianza nuestra identidad como organización, y atomiza todo lo bueno que somos. Divulgamos y contagiamos la experiencia positiva de nuestro equipo y nos convertimos en el mejor lugar para trabajar.

Por lo tanto, atracción y compromiso (fidelización) son el blanco. ¿Como lo logramos? En primer lugar, debemos trabajar internamente el desarrollo de nuestra marca empleadora, y en una segunda instancia elaborar cuidadosamente la estrategia de difusión.

Hoy, Internet y las Redes Sociales son el medio más masivo de búsqueda de empleo y de promoción de las empresas. Las experiencias se cuentan en las redes, y se multiplican y viralizan en tiempos récord. Por ese motivo, el Marketing Digital se convierte en una herramienta vital al momento de desarrollar nuestra estrategia de comunicación y difusión de la marca empleadora, para lograr el mejor posicionamiento y reputación, destacándose frente a la competencia.

¿Por qué Talent Branding en las empresas de Software? Para las empresas de Software, como otras de servicios profesionales, el capital humano es el más valioso. Porque depende exclusivamente de nuestro equipo, la calidad del servicio que brindemos a nuestros clientes y sus resultados.

Ponernos a la vanguardia de las nuevas tendencias en la gestión del talento, nos da ventaja frente a nuestros competidores, convirtiéndonos en un empleador atractivo para los mejores profesionales del mercado. Lograr que quieran trabajar con nosotros, y así conformar nuestro equipo ideal, y ser los mejores.

Habitualmente se comete el error de considerar al candidato más calificado técnicamente, subestimando el peso de los sistemas de valores y expectativas de ambas partes. Las nuevas generaciones de profesionales valoran mucho más que un buen sueldo.

Ese plus que la empresa que los contrate pueda ofrecerles (buen ambiente de trabajo, oportunidades de carrera, desarrollo y formación profesional, posibilidad de compatibilizar la vida personal y la laboral, como ejemplos) es lo que logrará una relación de compromiso y fidelidad entre ambos.

Por lo tanto, la coincidencia o no de los valores y expectativas, es lo que resultará en el éxito o en el fracaso del proceso de selección; entendiendo por "éxito" el logro de una relación de confianza, compromiso y cumplimiento de expectativas, y a largo plazo.

Con Talent Branding las probabilidades de éxito aumentan dado que el candidato ya conoce la reputación de la empresa y cómo es trabajar en ella, y se postula porque quiere formar parte. Hoy los mejores profesionales eligen donde trabajar. Es fundamental lograr que elijan tu empresa.

(*) Romina Szleifer: Senior RH Consultant en ByTheWeb Digital Marketing