Ya funcionan los primeros sensores inteligentes en la Ciudad

"Con esta tecnología podemos tomar mejores decisiones, predecir fenómenos y, a su vez, potenciar a emprendedores y vecinos", explicó Andy Freire

Para ser más inteligente, la ciudad de Buenos Aires siguió el ejemplo de Londres y Tokyio: instalar una red de sensores cloud para analizar todos sus datos abiertos en tiempo real.

El plan de Big Data es pionero en la región y prevé una alianza con la nube Microsoft y más de 1.000 sensores a lo largo y a lo ancho de la ciudad. El objetivo es contar con un insumo clave de las capitales de hoy: los datos.



En las últimas semanas, el gobierno porteño instaló y puso a funcionar las primeras cajas con sensores en algunos edificios y espacios públicos, como la sede del Ministerio de Modernización, Innovación y Tecnología, el Parque de la Ciudad, el Ecoparque y los hospitales Pena, Argerich y Odontológico.

"Los sensores estarán al servicio de la vida de los vecinos. Con esta tecnología podemos tomar mejores decisiones, predecir fenómenos y, a su vez, potenciar a emprendedores y vecinos". explica Andy Freire, ministro de Modernización, Innovación y Tecnología de la Ciudad.

¿Qué datos ofrecen los sensores?

Los sensores inteligentes permiten pedir variables medioambientales, como temperatura, humedad, presión, velocidad y dirección del viento, lluvia, intensidad lumínica, radiación solar, gases y contaminación ambiental. Su distribución se basa en la densidad de la población porteña.

"La planificación estratégica de la ubicación de los módulos se hizo en base a datos preexistentes. Están ubicados en forma de cordones y se van concentrando hacia el centro de la Ciudad donde tenemos mayor densidad poblacional y hay mayor actividad a medir", explica Alejandro Bollana, jefe de Producto en la Secretaría de Ciudad Inteligente, del Ministerio de Modernización, Innovación y Tecnología de la Ciudad.



Esto quiere decir que si aumenta la temperatura y la humedad en un barrio, el gobierno tendrá esa variable en tiempo real para saber, por ejemplo, que aparecerán más mosquitos y que tiene que fumigar.

Los sensores también sirven para medir flujos de personas y vehículos en zonas turísticas porteñas. A su vez, hay una idea a corto plazo de instalar sensores en la zona comercial de Once para medir y controlar que la carga y descarga de mercaderías se haga dentro del plazo de media hora establecido por la ley, y mejorar el transporte.

¿A dónde van los datos?

Básicamente se van a la nube de Microsoft Azure. Los datos que generan los sensores se transmiten por una red a una nube y pueden ser leídos en tiempo real en un tablero (dashboard). Esa nube está disponible para todas las áreas de gobierno.



Los datos se transmitirán en tiempo real por medio de una innovadora red llamada Low Range WAN (LoRa), que conecta a los sensores entre sí y a otros dispositivos. Según el gobierno, "es la primera red de escala para Ciudades Inteligentes de Latinoamérica".

Como forman parte de la política de datos abiertos de la Ciudad, también van a estar disponibles en los Data Sets que publica la Ciudad en su página web para que cualquier emprendedor, empresa o particular pueda utilizarlos para desarrollar aplicaciones que sean útiles para los vecinos.

"En una segunda etapa la red de sensores de la Ciudad se va a ir expandiendo, y además cada área de gobierno se puede sumar al proyecto con sus demandas puntuales para que los datos y la infraestructura sean utilizados en otras soluciones", dice Santiago Granda, gerente de Producto de la la Secretaría de Ciudad Inteligente, del Ministerio de Modernización, Innovación y Tecnología de la Ciudad. "Ese es uno de nuestros principales objetivos", concluye Bollana.




Más información: www.buenosaires.gob.ar.