5G y gaming: una alianza revolucionaria

Escribe Walter Souto, Head of Product en AWG

Ciudades inteligentes, vehículos autónomos, telemedicina, ropa inteligente, monitoreos de salud en tiempo real, automatización total de la industria, realidad virtual y aumentada y hogares cien por ciento conectados. No es un relato de ciencia ficción. Son sólo algunas de las cosas que llegan de la mano del 5G. Para los que tenemos algunos años, hoy nos parece imposible vivir sin el celular o conectados en todo momento y a veces perdemos de vista que, tan solo un tiempo atrás nos parecía un logro conseguir llamar de larga distancia a través de un teléfono público. Y ahora ya vislumbramos autos que se conducen solos.

Pero el 5G promete mucho más que un tipo de conexión diferente. Es una nueva forma de relacionarnos con la tecnología y con los dispositivos que ya existen a nuestro alrededor. Tan grande será la transformación en los próximos años que no son pocos los que afirman que, por delante, hay un cambio trascendental como lo fue la llegada de internet.

Una de las industrias que se verá revolucionada y que tiene una transformación por delante es la del gaming, que aunque vive en constante cambio enfrenta un gran desafío porque el 5G permitirá convertir a la nube en protagonista también en los videojuegos, eliminando las limitaciones de los equipos. La irrupción de Cloud Gaming es una verdadera revolución para la industria. Tenemos la posibilidad de consumir juegos de alta calidad en nuestro smartphone, notebook o televisor, eliminando la necesidad de constante actualización y evitando las limitaciones de procesamiento y almacenamiento. Es que el despliegue de la conectividad de quinta generación logra prestaciones similares a las que hoy se consiguen con una red de fibra óptica pero inalámbrica. Por eso decimos que Cloud Gaming y 5G van de la mano.

La red 5G posee tres características que la hacen distintivas con respecto a su antecesora y que resultan claves para la industria del gaming: mayor velocidad (hasta 100 veces más), menor latencia (por debajo de los 5 milisegundos contra los 100 milisegundos de 4G) y más conexiones en simultáneo (cientos de miles por kilómetro cuadrado). Es que a diferencia de lo que pasa con otros servicios de streaming, como la reproducción de contenido audiovisual, los videojuegos requieren de otra dinámica: El juego no es algo pregrabado sino que sucede en tiempo real y cada vez que uno aprieta el comando y debe responder sin demoras. La reducción de la latencia, entonces, se convierte en la clave para lo que viene.

Es importante dimensionar. Al hablar de gaming estamos hablando de una industria que creció cerca de un 20% durante 2020 y significó un movimiento de más de 170 mil millones de dólares, en plena pandemia y de una contracción de la economía a nivel global, según datos de la consultora Newzoo. Es un mercado con un potencial gigante que está en constante transformación. Pensemos ahora en lo que era ir a jugar arcade a un local hace 30 años con el fenómeno actual con transmisiones multitudinarias en vivo y torneos millonarios. Según la misma consultora, tres mil millones de personas jugaron algún videojuego en 2020.

La irrupción del Cloud Gaming y la ampliación de 5G en la escena de los videojuegos tiene también un potencial de inclusión al democratizar el acceso al universo del gaming ya que permitirá la incorporación de un nuevo público. Lo que se tiene por delante es un proceso muy similar a lo experimentado en la industria audiovisual con el modelo de suscripción de Netflix. A través de las teleoperadoras o mediante servicios directos, el consumidor pagará un abono y podrá acceder a un catálogo de juegos de calidad sin necesidad de grandes inversiones, ya sea una consola o una PC gamer y cada uno de los juegos. Como decía antes, la mayoría de los procesos se realizan en la nube y tan sólo se requiere de un dispositivo con prestaciones básicas y un gamepad para mejorar la experiencia de juego.

La carrera del 5G se ha largado y en los últimos años ha crecido de manera exponencial. Aunque por momentos parezca lejano, cada año los cambios serán notables. Según datos difundidos por Omdia, en el último trimestre de 2020 se alcanzaron las 400 millones de conexiones al 5G a nivel global cuando un año atrás no superaban las 20 millones. Y se espera que lleguen a 619 millones para fines de 2021. En ciertos países del Sudeste Asiático y Europa ya son miles los usuarios que abonan servicios de 5G para el consumo de juegos en alta calidad.

La situación en América Latina es distinta y es verdad que corre detrás en cuanto a las implementaciones, pero esto no es del todo negativo. Como observara Alejandro Adamowicz, Regional Technology and Strategic Engagement Director Latin America en GSMA -la cámara que nuclea a más de 800 operadoras móviles-, durante la realización del Cloud Gaming Forum, si bien el proceso en el continente llega tarde en comparación con otras regiones, Latinoamérica puede aprender del camino que ya recorrieron otros para potenciarse. A pesar de la pandemia el año pasado tuvimos novedades en algunos países, como la licitación del espacio en Chile, y este año se avanzará en muchos otros como Perú, Brasil o Colombia. En estos días, por ejemplo, los entes oficiales de Argentina realizaron pruebas pilotos y algunas teleoperadoras ya están avanzando también con ensayos.

El mismo informe de Omdia afirma que en los próximos 4 años las conexiones a 5G superarán los 3.400 millones, un crecimiento exponencial con respecto a las 400 millones actuales. Por su parte, desde la GSMA afirman que actualmente hay desarrollos en más de 45 países y proyectan que para 2025 el 7% del mercado corra sobre la red de quinta generación, mientras se expande y consolida el 4G a nivel global y sobre todo en la región. Estas dos tecnologías convivirán un largo tiempo y se espera que la nueva red se monte en gran parte sobre la estructura existente.

La ampliación de 5G y de Cloud Gaming representan un desafío enorme pero también, cada uno a su manera, una gran oportunidad. Y América Latina tiene, una vez más, la posibilidad de tomar lo que sucede en otros lugares y potenciar un crecimiento acelerado, pero necesitará encontrar soluciones propias que se adapten a sus necesidades. Es importante que los que estamos en la industria podamos ofrecer las herramientas para que de la mano de 5G y Cloud Gaming se logre una verdadera revolución.

(*) Walter Souto: Head of Product en AWG