La transformación digital es un camino que transitan todas las organizaciones en el mundo y que no tiene un único final. Por eso, para ser más eficientes, tanto organismos públicos como empresas privadas están buscando balancear entre la innovación tecnológica y la optimización de lo existente. Así es que encontramos que las soluciones tecnológicas se complejizan, justamente porque están compuestas de distintas partes que dan lugar al concepto de lo híbrido. Lo primordial es que esta infraestructura sea meramente flexible y con capacidad de interconectarse o, de otra forma, no podrá acompañar todo el proceso de transformación digital.

El sector público, quizás el que más rápido ha debido transformarse en este contexto de pandemia, la infraestructura, el sistema operativo y todas las soluciones deben estar preparadas para mantener algunas cargas de trabajo on-premise y respaldar el desarrollo en la nube. Esta es una de las razones por las que la adopción de sistemas como Red Hat Enterprise Linux ha crecido exponencialmente en la última década. Hoy más que nunca, se espera que los gobiernos y sus dependencias también puedan moverse entre los dos mundos con mayor agilidad, eficiencia y transparencia para sus gestiones.

En este sentido, la elección de un proveedor tecnológico por parte del sector público debe estar dada no sólo por el aporte técnico sino también por la capacidad de mantener una relación continua que ofrezca una visión a largo plazo, confianza y una perspectiva de cultura organizacional que haga más placentero el viaje hacia la transformación digital. Esto cobra aún mayor importancia cuando, al observar el Global Tech Outlook de Red Hat, notamos que las prioridades de las organizaciones de hoy son la seguridad, la gestión de la TI, la infraestructura de nube, la optimización de la TI existente y la automatización.

A nivel beneficios, el open source encuentra su valía en diferentes aspectos. Por ejemplo, hablando estrictamente de aspectos tecnológicos, el acceso a software seguro brinda un respaldo importante para todos los sectores de una organización, como actualizaciones, servicios de información y soporte. En el caso de Red Hat, por su modelo de desarrollo en comunidades, se ha posicionado como el colaborador comercial líder del kernel de Linux® y muchos otros proyectos que garantizan un acceso más rápido a las soluciones.

Este respaldo técnico también proporciona certeza para planificar, estabilidad para operar y soporte para innovar. Por ejemplo, Red Hat mantiene relaciones con miles de vendedores y proveedores de software, hardware, servicios y nubes con un ecosistema con más de 4000 certificaciones.

Todo esto termina de consolidar un modelo de desarrollo, implementación y gestión que puede alinearse a las necesidades del sector público. El modelo de open source de Red Hat favorece el intercambio de experiencia con miles de comunidades en el mundo que optimizan las soluciones permanentemente.

En conclusión, la misión del socio de tecnología para el sector público debe ser la de integrar partes, proponer eficiencias, preparar el terreno para un cambio cultural y ofrecer una visión de largo plazo para que las organizaciones puedan planificar con eficacia el camino por las rutas de la transformación digital. La suscripción al software de open source brinda ese compromiso estratégico y genera el marco para que los gobiernos y dependencias concentren principalmente sus esfuerzos en mejorar la entrega de servicios a los ciudadanos.

(*) Jorge Labayru: Regional Manager, Global Customer Success, Red Hat Latinoamérica