El nuevo rol del liderazgo, una clave para la retención de talento
19 de Junio de 2024Escribe Sabrina Zago, Gerenta de Talento y Cultura en Finnegans
Con el paso del tiempo, la figura de líder se fue transformando. Mientras que en el pasado un líder se definía por su autoridad y poder sobre los otros, hoy las organizaciones buscan algo más en los referentes. En palabras de Bill Gates: “Los líderes serán aquellos que impulsen a otros”. Más que simplemente ocupar un puesto de autoridad, un buen líder hoy se destaca por cultivar un ambiente de confianza y seguridad psicológica y emocional dentro de su equipo.
Cuando los empleados se sienten libres de expresar sus ideas, plantear sugerencias y desafiar el status quo sin temor a represalias, las organizaciones pueden experimentar un crecimiento exponencial en diversos aspectos. Así lo señala un estudio realizado por la consultora McKinsey, que también destaca que la seguridad psicológica es un elemento clave para el desarrollo de una cultura organizacional que fomente la innovación, la diversidad y la adaptabilidad al cambio.
En un contexto donde la escasez de talento calificado resulta un factor determinante en el mercado, la relación entre el líder y su equipo es fundamental. En Latinoamérica, el 78% de las organizaciones asegura que tiene dificultades para encontrar el talento tecnológico que requieren, y en Argentina esta cifra asciende al 81%, lo que acentúa aún más los desafíos que enfrenta el país en este aspecto (Experis).
A pesar de que la tasa de rotación haya disminuído del 21% al 16% entre 2022 y 2023 (OPSSI), la falta de talento IT continúa siendo una preocupación para las empresas tecnológicas. Según datos de la CESSI, el empleo en la industria IT pasó de 20.000 puestos de trabajo en 2004 a más de 140.000 en 2023, un crecimiento exponencial que deja entre 10.000 y 15.000 plazas sin cubrir anualmente.
No se trata solo de ofrecer un salario competitivo; la clave está en crear un ambiente laboral donde los empleados se sientan valorados, donde encuentren oportunidades de crecimiento y donde el trabajo sea gratificante. Los líderes desempeñan un papel crucial en la construcción de este ambiente, ya que son responsables de establecer la cultura y el clima laboral de la empresa.
En nuestra experiencia, el líder se involucra con el propósito de cada persona que conforma el equipo. Nuestro objetivo es alinear el propósito de la empresa con el de cada profesional, y el líder es quien facilita esta integración. Antes de asumir el rol de liderazgo, es fundamental que adquieran habilidades de relacionamiento, empatía y otras competencias clave a través de talleres específicos, a fin de que el líder cuente con las herramientas necesarias para transmitir el propósito de la empresa y comprender el de su equipo. Además, contar con instancias constantes de evaluación del aprendizaje y desempeño de cada líder permite que estas habilidades continúen desarrollándose e impactando positivamente en el equipo de trabajo.
Un buen líder debe adaptarse a las necesidades de cada miembro del equipo, siendo flexible y capaz de transformarse según lo requieran las circunstancias individuales de sus colaboradores. Formar líderes que comprendan la importancia de estos factores y que sepan cómo cultivarlos no solo mantendrán a los equipos unidos y contentos, sino también alcanzarán al máximo los propósitos personales y de la organización.
(*) Sabrina Zago: Gerenta de Talento y Cultura en Finnegans