Según una encuesta realizada por LinkedIn, el 92% de los Millennials -nacidos entre principios de los 80 y fines de los 90- y el 90% de los Centennials -fines de los 90 a principios de la década de 2010- están pensando en cambiar de trabajo. Es el 75% de la fuerza de trabajo actual, un número muy representativo que lleva a que las empresas, de cualquier tamaño e industria y en cualquier parte del mundo, se enfrenten a un desafío sin precedentes en fidelización del talento.

Con Taringa! (uno de los sitios de más tráfico por internet a nivel mundial), mi emprendimiento anterior, venía experimentando esta problemática en carne propia, al igual que le pasaba a Diego Boryszanski (creador de Fuljaus en 2018, galardonada como la mejor startup de e-commerce) y Ricardo Migoya (lideró durante 20 años Voyer International, empresa de búsquedas ejecutivas), mis actuales socios.

Justamente este “dolor” común, tal como es conocen a los inconvenientes persistentes en las empresas, nos llevó a crear Maslow, una empresa global de tecnología que cuenta con una plataforma propia que le permite a las grandes empresas administrar su política de recompensas y dar beneficios personalizados y en cualquier parte del mundo.

En un comienzo, pensamos que las empresas que más iban a necesitar nuestro servicio eran las de tecnología, que son las que más requieren desarrollar propuestas atractivas e innovadoras para el talento, pero nos encontramos que es un problema que atraviesa a todas las industrias.

Hoy estamos orgullosos del triple impacto que produjimos: en las empresas, ya que les damos el servicio de gestión integral de los beneficios, en los partners y proveedores que encuentran en nosotros un canal de ventas de sus productos y servicios y, por último, en el empleado, el usuario final, que puede decidir, qué beneficio usar, de la manera y en los plazos que más le gusten.

El nomadismo digital es otro factor que empuja la necesidad de que las áreas de recursos humanos deban reinventarse y encarar la fidelización con un nuevo enfoque. Nuestros beneficios no tienen fronteras geográficas, en tiempos donde crece la tendencia de las empresas que son full-remote o bien que se han volcado en gran medida al teletrabajo, necesitan tener propuestas de recompensas lo suficientemente flexibles como para adaptarse a estos nuevos paradigmas.

Creemos que cada persona merece los beneficios que realmente le importan y acceder a ellos de la manera más eficiente posible. La clave es motivar a las personas con lo que necesitan en el momento en el que lo necesitan, como teoriza el psicólogo Abraham Maslow, en su pirámide de las necesidades, a la que humildemente homenajeamos con nuestro nombre y nuestro objetivo de negocio.

(*) Matías Botbol: Co CEO de Maslow