Ciudades del mundo entero se encuentran elaborando planes contundentes para que la banda ancha sea accesible en cada uno de sus rincones, en respuesta a una preocupación que aumenta a medida que las nuevas tecnologías de la información toman protagonismo en las prácticas del ámbito comercial y personal.

Distintos gobiernos han entendido que deben acompañar de cerca este proceso, y que la digitalización debe formar parte de la agenda gubernamental. Hace pocas semanas el alcalde de París Bertrand Delanoë comentó durante la presentación de un ambicioso plan que tiene como fin convertir a la ciudad en una de las mejores conectadas del mundo: "Queremos que los parisinos puedan acceder rápidamente a todas las nuevas tecnologías disponibles y futuras".

La idea es colocar en la ciudad de la Torre Eiffel más de 400 puntos de acceso Wi-fi y accesos rápidos a través de redes de fibra óptica, al cabo de un período de 10 años. Y son varias las ciudades que se encuentran implementando proyectos -a veces gratuitos- de acceso a banda ancha con total cobertura geográfica (Filadelfia, San Francisco, Boston, Nueva York, Londres y Amsterdam).

En Buenos Aires el capítulo de la banda ancha total se abrió el pasado 11 de mayo, cuando el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Telerman, sorprendió a los asistentes del I Foro de Ciudades Digitales, organizado por la empresa Prince & Cooke: "Dentro del programa Puertas al Bicentenario venimos desarrollando con fuerza la idea de ser uno más de aquellos actores que deben movilizar e involucrarse mucho más con el desarrollo de las nuevas tecnologías".

El Jefe de Gobierno aseguró que ya estaba en diálogo un proyecto que pretendía extender la banda ancha hacia la totalidad de la Ciudad de Buenos Aires. "¿Por qué no convertir a la Ciudad en una de las primeras donde en cada punto haya acceso gratuito al uso de la banda ancha?", se preguntó Telerman. "Estamos en conversaciones en relación con eso", afirmó, y aseguró que una de las líneas de acción de su mandato será el acortamiento de la brecha digital, a través de políticas que fomenten la inclusión y la accesibilidad a las nuevas tecnologías (ver ¿Acceso gratuito a banda ancha en toda Buenos Aires?).

Canal AR retuvo estas palabras y rápidamente salió a buscar opiniones de referentes del sector (¿Cómo conectar Buenos Aires? Opina el mercado). Lo ambicioso del proyecto y su posible impacto positivo fueron los comunes denominadores. Sin embargo, la difusión de la noticia pareció ser mayor a las intenciones concretas: según publicó en un artículo el diario La Nación, se trataría "tan sólo de una idea de Telerman".

Meses atrás, Infobae Profesional publicó una nota titulada Buenos Aires dará Internet gratis con diferentes tecnologías, en la que Jorge Srur, responsable del proyecto “Puertas al Bicentenario” del Gobierno de la Ciudad, explicó que se buscaría la mejor combinación de tecnologías para avanzar con la iniciativa. También afirmó haber tenido contacto con universidades, representantes del ámbito académico y algunas empresas, aunque no se referió a cuáles.

“Vamos a escuchar a todos los sectores involucrados en el proyecto para viabilizar la mejor alternativa. Hay una gran apertura al diálogo porque hay una voluntad fuerte para ejecutar del modo más convenientemente posible”, enfatizó Srur a Infobae. “Hay una amplia variedad de alternativas técnicas y geográficas en estudio y de varias combinaciones posibles, según la zona. Se trata de consensuar una que integre de la mayor manera las variables económicas, tecnológicas y sociales”, concluyó el funcionario. En la misma nota, Patricio Seoane, presidente de la Cámara de Bases de Datos y Servicios en Línea (Cabase) ya anticipaba la necesidad de ver un cronograma de trabajo concreto.

“Hasta ahora, es sólo un proyecto”, comentaron desde prensa del Gobierno de la Ciudad ante la solicitud de este medio por obtener información del trabajo que se estaría llevando a cabo al respecto y de un contacto con un vocero autorizado para hablar sobre el tema. Todo parece indicar que el anuncio del pasado 11 de mayo no se relaciona con los planes a corto plazo del actual Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.