Google deberá respetar el derecho al olvido

Un fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea avaló el reclamo de un español que pedía que se borre información personal del buscador. Para Google, el fallo fue decepcionante

Un nuevo fallo obliga a Google a respetar el llamado "derecho al olvido". Ayer martes, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) dictaminó que la compañía deberá borrar de su plataforma los datos e información personales "antigua" de los usuarios que así lo requieran.

El Tribunal respondió así a un proceso judicial que se inició en España, donde el usuario Mario Costeja González solicitó que Google borrara de Internet la información sobre la subasta de una de sus propiedades por impago de impuestos.

El caso desató un fuerte debate público sobre temas complejos como la libertad de expresión y la privacidad de los usuarios en Internet. Para el Alto Tribunal, el derecho a la privacidad debe ser garantizado dentro y fuera de la red, aunque es necesario encontrar un equilibrio.

"Los gestores de motores de búsqueda son responsables del tratamiento que aplique a los datos de carácter personal que aparecen en las páginas web publicadas por terceros", dictaminó el Alto Tribunal.

"Si, a raíz de una consulta efectuada, la lista de resultados muestra enlaces incompatibles en este momento con la directiva europea, los enlaces y la información en la lista de resultados tienen que ser borrados", agregó.

Sin embargo, la corte señaló que es necesario encontrar un equilibrio entre los derechos fundamentales de privacidad y el interés legítimo de los internautas que estén interesados en alguna información. El equilibrio estaría en función del papel que el afectado desempeñe en la vida pública, según el Tribunal.

"Los enlaces a páginas web que contienen esa información deben suprimirse de esa lista de resultados, a menos que existan razones particulares, como el papel desempeñado por esa persona en la vida pública, que justifiquen que prevalezca el interés del público en tener acceso a esa información al efectuar la búsqueda", sostuvo el Tribunal en el fallo.

Google, "decepcionado" por el fallo

Google, por su parte, se mostró en desacuerdo con el fallo, y apuntó a que la medida puede generar un daño a la libertad de expresión de quienes publican en Internet. Los de Mountain View señalaron, además, que no sería lógico que los motores de búsqueda tengan que censurar contenidos que no son propios.

Estamos muy sorprendidos de que difiera tan drásticamente de las conclusiones del abogado general y de las advertencias y las consecuencias que ya identificó”, señaló María González, directora de Asuntos Legales en Google España.

"Se trata de una sentencia decepcionante para los buscadores y en general para quienes publican contenidos en Internet”, agregó.


Más información: www.google.com.