La venta de notebooks creció un 80% en Argentina

Según datos de GfK, las ventas crecieron un 82% en julio a raíz del ingreso de equipos importados y una caída del precio. Se terminó el "Made in Argentina"

La quita de aranceles a la importación de productos informáticos provocó fuertes cambios en el mercado argentino de notebooks, que tuvo un crecimiento de ventas exponencial el mes pasado.

De acuerdo con las cifras de la consultora GfK, citadas por Clarín, el segmento tuvo un crecimiento interanual del 82% el mes de julio. La clave fue el ingreso de equipos extranjeros.

"Se estimaba que la tasa de crecimiento podía desacelerarse", comentó Ana Carattino, de la consultora GfK, y agregó: "Pero eso quedó superado por la realidad, habiendo crecido más de un 80% en el mes de julio".

Según la analista, "entre enero y julio, el mercado de notebooks acumuló un crecimiento del 63%, en término de unidades, respecto de igual período del año pasado". El panorama es claramente distinto al del 2016, donde los primeros nueve meses del año registraron una caída del 23% respecto al mismo periodo de 2015.

Un 18% más baratas

Y el factor que movió la aguja del mercado, según Carattino, es el precio. En promedio, el valor de una notebook "disminuyó un 18%, desde que se anunció la quita del arancel", en septiembre de 2016 (ver también: Macri decretó la quita de aranceles a la importación de productos informáticos).

Sin embargo, la apertura de las importaciones puso en jaque a la industria de portátiles "Made in Argentina", y las empresas informáticas locales como Banghó, Núcleo y Air Computers dejaron de ensamblar notebooks para importarlas.

"Esto quedó trunco porque hoy en la Argentina ya no es viable producir portátiles", aseguró Marcelo Aloy, gerente de la sucursal porteña de Air Computers, a iProfesional. "Se volvió antieconómico competir frente a la entrada de equipos con arancel cero".

9 de cada 10 son chinas

En concreto, más del 90% de las ventas son de equipos importados. Particularmente de China, ya que 9 de cada 10 de las notebooks que se venden en el país son importadas desde ese país, según los datos provistos por CAMOCA, la entidad que nuclea a las marcas nacionales de productos informáticos.

"Para empezar, importar los componentes de una notebook por separado ocupa en un container entre dos o tres veces más de espacio que una computadora ya ensamblada. Esto equivale a tener que pagar más del doble por el servicio logístico", explicó Aloy.

Y agregó: "A esto se sumaba el factor mano de obra, dado que desde el armado de los equipos hasta la gestión del inventario demandaba mucho más personal que una operación dedicada sólo a la comercialización. Eran costos que no podíamos absorber".