El 20 de julio se conmemora el día en que se fundó la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) en París en 1924, convirtiéndose en un evento fundacional para la industria informática. Años más tarde, en un emocionante encuentro entre las matemáticas, la estrategia y la informática, el genio Alan Turing estableció una conexión duradera que ha dejado una huella imborrable en el mundo del ajedrez y la Inteligencia Artificial (IA). A través de sus innovadores algoritmos, Turing allanó el camino para que las computadoras desafiaran a los mejores maestros del ajedrez y llevaran sus habilidades a límites insospechados.

El ajedrez, considerado durante mucho tiempo como un juego intelectual supremo, encontró en la informática una compañera perfecta para explorar nuevas fronteras y desafiar los límites del pensamiento estratégico. Turing, padre de la teoría de la computación y pionero de la IA, vio en el ajedrez una oportunidad para poner a prueba sus ideas revolucionarias. En 1947 presentó al mundo su concepto de la "máquina de Turing", una visión abstracta que le permitía a una máquina manipular símbolos según reglas predefinidas. Esta idea sentó las bases de la informática moderna y allanó el camino para el desarrollo de los primeros ordenadores. Y aunque no diseñó específicamente una "máquina del ajedrez", su concepto fue fundamental para el desarrollo de programas y motores de ajedrez capaces de desafiar a los mejores jugadores humanos.

Pero la conexión entre este deporte y la informática va más allá de las capacidades de juego de las máquinas; pues ha sido utilizada como campo de experimentación para desarrollar algoritmos y técnicas en diversas áreas, como el aprendizaje automático y las redes neuronales. Estas aplicaciones permitieron a las computadoras mejorar su juego a través de la experiencia y el aprendizaje, demostrando la estrecha relación entre las matemáticas, la informática y la estrategia.

Continuando con esta tradición, el alumno Emmanuel Brea, (ahora ex) estudiante de Ingeniería en Informática, ha desarrollado su tesis de sobre uno de los aspectos más importantes de este apasionante juego: las aperturas. Estas jugadas desempeñan un papel crucial en el desarrollo estratégico de una partida y establecen las bases para el avance -o retroceso- de las piezas, el control del centro del tablero y la preparación de planes tácticos futuros.

La importancia de la aplicación radica en la capacidad del asistir al jugador para contar, memorizar y aprehender un número de aperturas que permita incrementar su arsenal táctico y estratégico.
Su sistema de recomendación con Inteligencia Artificial se basa en las lecciones ofrecidas en sitios especializados como “Chess.com” y similares para ofrecer alternativas que estadísticamente han demostrado ser exitosas. Se trata de una aplicación móvil que se integra mediante una interfaz de programación con el sitio, analizando las lecciones y poniéndolas en el celular del jugador o entrenador.

Entre los aportes de la nueva App se puede destacar:

• Dominio del juego: Un buen repertorio de aperturas es importante ya que permite al jugador llevar la partida hacia lugares conocidos.
• Ventaja en el reloj: permite usar el tiempo para calcular y tomar mejores decisiones en momento críticos de la partida.
• Conocer las aperturas del rival: conociendo el rival, si repite cierta apertura, podremos tomar ventaja y prepararnos mejor rápidamente.
• Aprendizaje de aperturas: aprender varios sistemas es una tarea difícil y tediosa, sin él, el jugador deberá calcular constantemente desde las primeras jugadas, siendo susceptible a errores o trampas más fácilmente.

La aplicación creada por el Ing. Emmanuel Brea encuentra su lugar en un sector no explorado aún por las compañías de software especializadas.

Así, el legado de Turing en el ajedrez y la informática es un recordatorio inspirador de cómo el pensamiento creativo y el enfoque matemático pueden unirse para alcanzar nuevas alturas.

La Facultad de Ingeniería y Ciencias Exactas de UADE, y sus carreras de informática, celebran a entrenadores, jugadores y aficionados del ajedrez en todas partes del planeta, colaborando para que la llama siga encendida.

(*) Daniel Feijo: Director de la carrera de ingeniería en informática, UADE