El gobernador de la provincia de Córdoba, José Manuel De la Sota; junto al ministro de Economía de la Nación, Roberto Lavagna; y el actual Chairman del Consejo de Administración de Intel, Craig Barrett, firmaron hoy una Carta de Entendimiento para llevar adelante el primer Centro de Desarrollo de Software de Intel en el país, que estaría operativo en la Ciudad de Córdoba a partir de marzo de 2006 y reclutaría 400 especialistas en los próximos 5 años. Este Centro se integrará a los que ya operan en Estados Unidos, China y Rusia.

"Intel, con quien hemos llevado adelante algunos programas, ha tomado la decisión de invertir en la provincia de Córdoba. Este no será simplemente un lugar donde se trabajará en software. Estamos hablando de un laboratorio. Esto será un laboratorio donde serán contratados ingenieros senior", expresó el ministro de economía de la Nación, Roberto Lavagna, durante la conferencia de prensa.

A partir del acuerdo firmado hoy, se creará un centro para integrar software en los procesadores de Intel, desde un sistema operativo hasta aplicaciones para la industria de la salud digital. "El producto de los ingenieros que trabajarán en Córdoba será materia gris dentro de nuestros productos y no simplemente líneas de código. Estamos aquí para anunciar este laboratorio y empezar el próximo año cuando tengamos el espacio y comencemos a contratar a los primeros especialistas", expresó Barret durante su presentación en el Ministerio.

Por su parte, el Gobernador de Córdoba manifestó su agradecimiento por la decisión y el apoyo de Lavagna y el Gobierno Nacional en su conjunto. "Las leyes que declararon industria al software y su promoción fueron indispensables para obtener estas inversiones, que estarán muy ligadas al trabajo que se hace desde las Universidades de la provincia", expresó De la Sota.

Como parte de los incentivos que ofrecerá la provincia a Intel pueden destacarse un subsidio al 7% de los salarios brutos que se vayan a pagar en el Centro; beneficios impositivos por 10 años; un fondo de investigación para estudiantes y docentes; a su vez, la multinacional donará a la UTN de Córdoba equipamiento que será reutilizado en el proyecto anunciado. El edificio será construido por la gobernación y entregado en comodato a Intel por 50 años.

El Centro de Investigaciones que Motorola abrió en Córdoba en 2001 demandó alrededor de 15 millones de dólares como primera inversión y aproximadamente 44 millones de dólares en sueldos para los investigadores. Si bien hoy no se dieron a conocer cifras oficiales sobre la inversión- ya que todavía quedan por delinear algunos puntos del acuerdo- no sería tan descabellado pensar en tales cifras como una posible inversión inicial.

De visita con los maestros

El ministro de educación, ciencia y tecnología, Daniel Filmus, también se sumo a los anuncios que Craig Barret trajo bajo el ala protectora de Intel. En el Palacio Pizzurno se entregaron los premios Educ.ar – Intel a la Calidad Educativa, Argentina 2005: Innovación en el uso de la tecnología en el aula, certamen en el que se presentaron alrededor de 150 proyectos de todo el país, cuyo principal objetivo fue premiar a docentes de instituciones nacionales, públicas y privadas que hayan promovido el uso de las nuevas tecnologías en el aula.

Al finalizar su presentación en el Ministerio de Educación, Canal AR le preguntó a Barret cuál es la principal característica de un país como la Argentina. Su respuesta fue: "Creo que lo mejor que tienen es su sistema de educación que le permite a los jóvenes innovar en las nuevas tecnologías y tener un acercamiento profesional con las mismas. Esta es la mejor política que un país puede tener en cuanto a tecnología".

También hubo moda

Como si todo lo dicho fuera poco, Barret también anunció su colaboración en un proyecto cuasi faraónico del empresario Alan Faena que incluye la construcción de un barrio de 8 cuadras y una superficie de 220.000 metros cuadrados llenas de Hoteles, viviendas, museos y por su puesto tecnología. Esta iniciativa edilicia es la unión entre las ambiciones de Faena de "redefinir la experiencia de vivir" (con lujo) y los 12 proyectos de Ciudades Digitales que Intel tiene en el mundo (Londres, Cleveland, Filadelfia, Osaka, Taipei, entre otros).

Este medio le preguntó a Barret por la decisión de invertir en Argentina en el proyecto inmobiliario de Alan Faena. Su respuesta ratificó algunas de sus palabras formuladas durante la lujosa presentación en el Hotel El Porteño: "Nuestro objetivo es integrar la tecnología en el ambiente y en este sentido, nuestro rol en el Faena Group es meramente consultivo en este aspecto".

Es decir, Intel- aparentemente- no realizará inversiones en el barrio imaginado por Faena. Los que sí invertirán son los mexicanos de Telmex (alrededor de 10 millones de dólares), que se constituirán en el pilar que sustente la digitalización de ese barrio con sus redes de infraestructura en datos, telefonía, etc. E Intel recomendará cómo deberá aplicarse la tecnología inalámbrica que dará conectividad a estos 220.000 metros cuadrados.

Mientras que la Argentina con exceso de realidad queda del otro lado de Puerto Madero con los avatares de esta vida como ser la desocupación, el hambre y la falta de perspectiva, existe otra Argentina que pretende ser una nueva ciudad- por ahora sólo se autodenomina neighbourhood, o barrio en castellano- en donde el arte, la cultura y la tecnología son puestas al servicio del lujo y una "nueva experiencia de vivir".

Lo que antes era la General Paz para delimitar en el imaginario colectivo los bordes de la Capital Federal, hoy el nuevo límite es reconstituido sobre una nueva calle, Avenida Madero. Están los que quedan de un lado, los más próximos al Luna Park y a las costumbres consuetudinarias de una gran urbe y los nuevos vecinos de un barrio que pretende ser completamente digital (y exclusivo) de la mano del Faena Group.